miércoles, 10 de julio de 2013

Haciéndome la del mono tributo.

Al final fui a la AFIP. Ni dos horas de cola, ni puteadas al gobierno. Entré, esperé quince segundos y me atendieron."Tenéquetené do certificado de domicilioriginal y copia del deneí" me lanzó automáticamente el bigotudo de mesa de entradas. Yo ya traía todo en la mano, como un nene que mandan a comprar la leche al almacén con el billete de diez pesos estrujado en la manito. Pero claro, había una puñalada trapera esperando;"Y tené que llenar el formulario F 460". Pánico.
Mis peores temores se estaban cumpliendo. Hay quien se inmoviliza ante la aparición de un delincuente armado, otros que sienten el pánico ante una situación violenta. Bueno a mí me ponés un formulario como el F460 y me dejás inmóvil y pálido con un nudo de angustia en la garganta.
Me fui del edificio, alegando que no tenía birome, pero con la firme intención de tomarme el bondi y venir a casa pare meterme abajo de las frazadas. Llegué a la esquina y respiré profundo, como me enseñó el Sri Sri Ravi Shankar en C5N. Pensé bien, me crucé al kiosco, compré una birome y me volví a meter en la AFIP, envalentonado. Llené la parte del formulario que pude; nombre, dirección, teléfono y pará de contar.
Una doña con acento ucraniano me guió en lo que faltaba. Me dieron un número, me dijeron que termine el trámite en internet y acá estoy, meta F5 para ver si puedo entrar pero por ahora nada.
En fin, una entrada del carajo la de hoy eh. Ah, blogger atrasa como 15 años y no me deja subir fotos. Así que hasta que me haga un blog en wordpress y si lo necesitan, acá tienen el formulario F460. De nada.

viernes, 5 de julio de 2013

Monotributaciones parte I

Sin dudas uno de los aspectos más dolorosos de convertirse en adulto es cuando te das cuenta de que luego de esquivar el bulto por años, un día tenés que enfrentarte a la AFIP. Y no lo digo como evasor de impuestos, claro, sino como negado a la hora de realizar tarea matemática alguna, ya desde mi tierna infancia, costumbre que jamás abandoné con el paso de los años y me obliga a realizar confesiones que en un momento eran divertidas y hoy son patéticas; no sé dividir, no sé multiplicar, no sé cómo poronga se saca un porcentaje, aunque me lo han explicado 250 veces a lo largo de la vida. Y no sólo eso, además me produce un sarpullido horrendo la mención de términos como arancel, tributo, exención de ganancias etc etc.
Es en estos momentos, cuando uno debe ingresar por vez primera una oficina de burocracia impositiva, es cuando uno añora fuertemente la niñez, aún los momentos más crueles, como la visita al dentista. Ahí por lo menos habían juguetes, hechos mierda pero ahí estaban y si el consultorio era muy pobre al menos habían revistas,que se yo, uno se entretenía con cualquier pelotudez. En la AFIP la única manera de entretenerte es contar los tubos de luz quemados, ver la tele muerta en TN con Mirta Tundis hablando de aportes previsionales, y mirar las paredes de durlock hechas mierda del roce constante de burócratas . Hagan algo, no sé, pongan un abaco así los más inmaduros aprendemos a contar.
Se me ocurrió resaltar cada una de las palabras espantosas relativas a la burocracia para que ud querido lector sienta en carne propia las aberraciones del lenguaje administrativo.
Y ahí vamos entonces, fui a la AFIP a gestionar mi inscripción al monotributo con DNI y un servicio a mi nombre tal como me dijeron pero no, ahora dicen que necesitan otra constancia de domicilio por lo que tengo que ir al registro civil a tramitarla. Intenté una defensa del tipo "mi DNI tiene mi domicilio" pero fue como ver a un cadete de la escuelita de tenis tirándole una volea a Federer. El "no sirve" fue implacable. Gracias señora.
Esta historia continuará.

miércoles, 3 de julio de 2013

Es por allá?

Hoy mientras miraba una eterna definición por penales en el mundial sub 20 entre Colombia y Corea del Sur pensaba "pero la concha del mono, adónde mierda estamos yendo?". Y el plural era por mí y mis otros yo, que no me supieron responder, recontra hinchados los huevos de escuchar la misma pregunta hace no menos de 20 años.
 Así que me puse a limpiar la casa, como si abajo de la mesada o adentro del botiquín estuviese la respuesta. y no estaba, no. ¿Qué hacer? ¿Quiero ser tuitstar hasta morirme? ¿Ser COMUNITY MANAGER FREELANCE? ¿Quiero tener un show radial escuchado por medio mundo y que me consideren un capo? Tal vez quiero hacer inferiores en El Porvenir, ser capturado por un reclutador de talentos de Racing, salir campeón, goleador, jugar 5 años ahí, que me vendan al Liverpool, convertirme en volante ofensivo, ser ídolo, que Gerrard me entregue la cinta de capitán en su último partido, romperla un par de años más y volver a los 36 para ser campeón de nuevo en Racing pero no. Ya tengo 35 y no llego a hacer todo eso en un año. ¿Entonces? ¿Quiero manejar una Fiorino y laburar para el correo? No, pero parece que ahí vamos. ¿Está mal? Es digno. ¿Está bien que sea digno? Y mirá, que sea indigno es peor, me parece.
Hoy pensaba en lo cruel pero acertado sería todo si uno al morir se encontrase con Dios y tuviese un diálogo así:

-Hijo mío, si sufriste tanto y moriste conformándote con la dignidad, hubieses buscado mejor el sentido de la vida

-Pero dónde Dios? Dónde? Estudié 20 carreras, me casé me divorcié me volvía a casar, tuve hijos, perros, escribí un libro, planté un árbol, planté un perro, DÓNDE ESTABA EL SENTIDO DE LA VIDA, DIOS?

-Lo escondí en un track del cuarto disco de La mancha de Rolando. Tenía ganas de romper las pelotas.-

martes, 2 de julio de 2013

El palacio de la urna

Segundo día como COMMUNITY MANAGER y ya saliendo a buscar un laburo en serio. Al final ayer no pude ir a verlo a este tipo Gustavo y terminé cayendo hoy, luego de una noche movida con la abuela Tota, que a las 4:45 manifestó un pico (?) de 16 de presión. Así que fuimos al Gutierrez para que le dijeran lo que le venía diciendo La Piba: sentate ahí descansá y no rompás las pelotas.
En fin, volvimos a las 6, dormimos abrazados en el sillón un ratito (anoche vimos "antes del amanecer, la primera, y eso nos aportó romanticismo ponele) y 8:45 salimos, la llevé al laburo y me mandé atravesando la ciudad por la (yo digo LA, los platenses dicen EL) diagonal 80, creo. Aparecí en una tranquera cerca de 72, ese boulevard amplísimo que va cambiando el número y delimitando el casco urbano de La Plata por los cuatro costados, 72 vendría a ser el extremo sur. De a poco me oriento. Bueno, ya va un año y medio acá, loco sería que no me orientase. 
Crucé la tranquera y estacioné. Me acerco a la garita, donde había otra valla y le pregunto al guardia, en realidad un gordo de bigotes de jean y campera, sin insignia alguna, si conocía a un tal Gustavo. Yo estaba tan en bolas como vos que me estás leyendo, o sea, no sabía dónde me metía. El tal Gustavo laburaba en Correo Argentino pero ahí ya no había lugar para meter a laburar una camionetita, de todos modos me había dicho que le pegara un tubazo unos días después, que "con esto de las elecciones seguro sale algo". Eso era todo lo que sabía.
El guardia me estaba por responder cuando aparece de atrás mío un flaco alto con unas carpetas bajo el brazo y le dice, "dejá, yo lo llevo", tras lo cual cruzó la valla sin mirarme siquiera, tal vez creyéndose irresistible. Mientras lo seguía caminando dos pasos atrás como una esposa iraní pensaba cómo matar el silencio de esos quince, veinte metros eternos. El flaco me ganó de mano "venís a ver a Gustavo, eh". Y sí, yo iba a ver a Gustavo, te lo dije hace cuatro metros si mal no me acuerdo "sí, tenía que venir ayer pero se me complicó y bueh..."dije como si le importara a alguien, mientras entrábamos al galpón.
El galpón era de ésos galpones ferroviarios, de cincuenta metros de largo por quince de ancho, techo de chapa, en el suelo un senderito pintado prolijamente con pintura amarilla y en el fondo, al menos cincuenta personas trabajando en diez metros cuadrados. Estaban armando cajas de cartón. Cuando me acerqué un poco más me pareció que eran urnas. Cuando miré hacia los costados me di cuenta de las pilas descomunales de urnas sin armar que llenaban el depósito. Donde pusieras un ojo, había una urna. Armada o sin armar. Me destaqué haciendo una increíble observación al flaco que me arriaba ahí donde estaba Gustavo:

-"Estas son todas urnas, eh?"

-"Seh, todas urnas son"

-"Terrible, pero son una banda! hay urnas para toda la provincia acá?"

-"Sí, son todas las urnas de la provincia, acá hay 35 mil urnas"
-"Uoff, qué de urnas"

Luego de emular junto al flaco alguna de aquéllas conversaciones entre Freud y Jung, entré a una oficinita y ahí había un tipo sentado atrás de una notebook. Tenía una cara de Gustavo que volteaba. Lo corroboré preguntándoselo y dándole la mano. "Hola, soy Juan, quedé con vos en venir ayer pero se me complicó" como si le importara a alguien, otra vez. Gustavo me pidió que lo espere, que ya me atendía, tras lo cual no supe bien que chota hacer. ¿Me quedaba parado adelante del escritorio mientras Gustavo hablaba con el flaco de cualquier pelotudez? ¿Me iba de la oficina para pispear un poquito a los armadores de urnas? Eran hombre y mujeres, unos armaban, otros pasaban pegamento,otros pegaban un papel en un costado, todos tomaban mate, charlaban divertidos y escuchaban un rock horrible que si no era Callejeros pegaba en el palo. Me daban curiosidad, pensé en La Piba, quise sacar una foto para mostrarle pero me dió la sensación de estar practicando espionaje y me quedé en el molde, con un pie adentro y otro afuera de la oficinita hasta que Gustavo se dignó a atenderme con la calidez que solo un empleado de correos puede tener. Si hasta Flanders los odia. Me pidió los datos, los anotó en una papeleta, me dijo que no intente laburar en Andreani porque ahí no pagan y que tampoco pruebe en Correo Argentino ya que no hay lugar para más camionetitas, me repitió. Por ende la única salida era Gustavo, haciendo vaya a saber qué porque "las urnas se reparten en camiones, pero con la Fiorino seguramente te necesiten para hacer algún mandado, algo así". La palabra "mandado" fue un gol de Quilmes que me mandaba al Nacional B, 35 años y "laburo haciendo mandados" tampoco me cerraba. No se quedó ahí Gustavo; cuando le pregunté "pero tenés idea de lo que puedan pagar, masomeno?" se encogió de hombros, negó con la cabeza y me repitió apoyando la palma en la papeleta con mis datos "nosotros te vamos a llamar, ya tenemos tus datos"
Espero ansioso. O no.

domingo, 24 de marzo de 2013

La insostenible actitud gótica

Uno de los estilos estético musicales más insostenibles es el gótico, sin dudas. Los grupos que intentan llevar adelante este género irrumpen con la fuerza de una tormenta otoñal y se desvanecen como nieve en primavera, sin dejar demasiada huella. Y esto es claro, uno no puede andar eternamente ensombrecido y sórdido por la vida. Se puede tener un mal día, un mes terrible, un año malísimo, una vida del orto, pero en algún momento siempre aparece algo que te hace bien, que te sirve, que te pone feliz. No sé, llamale guita, amor, o que tu equipo volvió a ganar, te prendieron mil bengalas hoy, como dicen los sordos ésos.

Pero la cultura gótica te obliga a permanecer sombrío, así, como un mandato. Mandato que no pudo respetar Francesco Pappalardo, ex cantante y líder de Lacuna Coil, reconocida banda del palo. 
Cuenta la leyenda que Pappalardo fue sorprendido por el resto de la banda ensayando una versión libre de "boquita de caramelo" del Grupo Sombras, incluyendo una simpática coreografía en el estribillo que dice "Para tí, para tí, todo mi amor lo tengo para tiii".

La banda se le abalanzó. Cristina Scabbia, la vocalista, gimoteaba llorando en el piso entre convulsiones. El bajista intentaba cortarse las venas con una púa, el baterista perforó el redoblante clavando los palillos de lleno en el parche. El guitarrista y el tecladista lo zamarreaban enérgicamente. Francesco intentó espetar una defensa.

-"El Dani Agostini está feliz y te escribe un "boquita de caramelo", está triste y te escribe un "la ventanita". Acá no. Estás alegre, triste, te pica un huevo, rendiste epistemología y siempre UOFF, pum para abajo, sombrío, llueve, gillette en las venas. Sacámela un poquito chabón."

Pappalardo fue excomulgado de la banda y defenestrado en el circuito gótico mundial por ser un tipo feliz. Jamás pudo volver a formar una banda y hoy es un diariero alegre en Nápoles, donde los fines de semana recorre los bares con su cumbia gótica, tocando sus hits "La ventanita con los vidrios rotos" y "Falso como billete de dos góticos", entre otras gemas.

Historias del rock. Héroes que quedan en el camino. Volveremos con más.

martes, 3 de abril de 2012

Para los hombres: el fútbol puede salvar tu pareja.

Muchas veces se ha hablado del fútbol como un elemento destructivo para la mayoría de las parejas. El fundamento es bastante lógico, por no decir básico; el hombre quiere mirar todos los partidos de fútbol, la mujer se aburre por tenerlo hipnotizado, embobado frente a la TV, o la radio, o se queja porque los domingos no cuenta con su presencia en la casa ya que el tipo se va a la cancha a ver al campió, que termina comiéndose una serie de pijasos, lo cual provoca la consabida cara de ojete en el patriarca. Ponele.
Querido amigo, tal vez esto sea así en parte, y las quejas femeninas pueden tener su fundamento, de acuerdo. Pero el fútbol bien utilizado puede salvarte la vida. 

Hoy les hablaré a los varones -futboleros, de otro modo no serían "varones", de más está decir- demandantes de afecto, paranoicos, inseguros. Es para vos, que en una relación sentís que das el 200% de cariño y ternura para recibir cada tanto una respuesta. Una caricia, tal vez un mimo, y eventualmente una garchadita express. La frustración golpea tu puerta, han pasado algunos años, la relación tal vez se estancó y seguramente sientas que a tu mujer ya no le pasa lo mismo que a vos. Pensás demasiado, éso pasa.


Si no se te da el córner, probá con un tiro libre, aunque los resultados pueden variar



Para contrarestar el efecto neurótico obsesivo de una manera rápida, sin esperar al martes para que tu terapeuta te dé las mismas vueltas de siempre, nada mejor que lo que yo llamo "El método del córner para Newell's".

Cuando la paranoia empiece a invadir tus neuronas, cuando el malestar quiera regir tus pensamientos, cuando notes que ella se va al kiosco a comprar cigarrillos y tarda dos horas y cuarto, aunque no fume, simplemente pensá en un jugador de Newells preparándose para patear un córner. ¿Cuántas cosas pueden pasar a partir de éso? Si sos joven, vas a verlo a Sperdutti. Si sos bastante mayor a Marito Zanabria. Tal vez veas a la Chancha Cozzoni, no importa, viene el córner para Newells, y algo tiene que pasar. Despeja la defensa y sale la contra rápida, o bien salta Garfagnoli y pega en el travesaño, ¿quién sabe?. Pero todo puede pasar después de un córner para Newells. 

Como por ejemplo, que vos te dejes de pensar en la bruja ésa y veas cómo la pelota queda boyando en la medialuna y el Larry Saldaña la agarra de lleno para gritar un gol que hasta vos, canalla de toda la vida, no podés evitar gritar.


Próxima entrega: el método "La lleva el ocho de Banfield", para retrasar la eyaculación.


lunes, 26 de marzo de 2012

Juntando porquerías, primer round. El viajero engañado.

Una sana costumbre que adquirí de aquéllos lejanos tiempos en los que revisaba las bolsas de basura buscando alimentos, fue guardar cositas que me llamaban la atención. Así fue que llené mi billetera de naipes, fotos de gente muerta, billetes chinos, comprobantes de pago de MOVISTAR por más de 7 mil pesos y listas de supermercado. Muchas de estas cosas son irrelevantes, guardé otras como amuletos de una suerte que jamás llegó, y alguna papeleta como ésta fue guardada hasta el momento de ser publicada en un blog. Los nombres completos fueron tapados por un mínimo de piedad que me queda. 

Mi vida el Tavo

Además de decirme la obviedad "eh, julio del año pasado, no hace tanto que andabas revisando los tachos de basura", ¿qué puede usted agregar a ésta bella imagen? ¿Creemos que el coordinador es el culpable de arruinar las vacaciones de Gustavo? ¿Estamos seguros de que la zorra ésa no hizo nada para generar éste quilombo? ¿Y qué tal si todo ésto fue una construcción en la mente de un dentista paranoico? En fin, el panel de comentarios está abierto aquí debajo. Se agradece si su opinión es firmada con su @. Y si no deja su comentario, le deseo un feliz viaje para esta semana santa, pedazo de cornudo. Y ahora me voy, la basura de MC Donalds sólo puede comerse ni bien sacan las bolsas a la calle, una vez que se enfría es intragable.

jueves, 15 de marzo de 2012

China contra mí

Por algún motivo que desconozco gracias a mi abundante ignorancia, los chinos siempre han sido vistos desde occidente como el paradigma de la sabiduría. Al parecer, mientras de este lado del mundo andábamos en taparrabos esperando que vengan los españoles a llevarse todo, los chinos ya la tenían clarísima con un montón de cosas, por ejemplo ya festejaban la navidad de ellos tirando cañitas voladoras y rompeportones, y al parecer comían pizza mucho antes que los tanos aprendiesen a amasar. Hasta el helado inventaron, dicen. Sarasa.

El tema es que considero que mis motivos para no arrodillarme ante la filosofía china son mejores que la horda de pelotudeces orientales que uno tiene que masticarse, como el feng shui,o el arte de acomodar los muebles y poner fuentecitas en el living para que la vida te sonría. ¿Los chinos viven bien gracias al feng shui? ¿Posta que los chinos, que viven uno encima del otro en minicasitas tienen lugar como para andar dando vuelta los muebles de la casa? Y la ropa. ¿Alguien ha visto alguna vez a un chino bien vestido? Les encanta el mix ojotas con medias, camisa y pantalón de gimnasia. Y peor cuando quieren vestirse elegantemente. La camisa cuello mao es al buen gusto lo que Auschwitz a la comunidad judía. Y pido perdón por la comparación. Sobre todo a los diseñadores de moda.

China, un país con más de mil millones de habitantes (MÁS DE MIL MILLONES DE HABITANTES, SÍ), no pudo aún dar a luz a un sólo chino capaz de desbordar y mandar un centro venenoso al segundo palo, o de penetrar un ingoal, o de bancarse un set no te digo ante Federer, ni siquiera frente al maraca de Andy Murray. A gatas si sacaron un basquetbolista decente, Yao Ming, que si figuró en la NBA fue por medir 2, 30, porque jugando era del montón y encima se rompía más fácil que Riquelme.

Hay mucho más para decir, pero nos quedamos sin tiempo. Me despido saludando a todos aquéllos que esperan agazapados la palabrita para contarnos que en China "crisis" significa "oportunidad". Muchachos, les recuerdo que en China "ovejero alemán" significa "asadito", ya saben.

martes, 6 de marzo de 2012

El temible flagelo de la gaturrización infantil

Como todos sabemos, marzo es la época de la remanida "vuelta al cole". Con profundo pesar y escaso asombro asistimos a campañas publicitarias que cuentan con la figura de "Gaturro", aquél horrendo dibujito "creación" de un lamentable ñoño de guante blanco conocido como NIK. Yogures, celulares, útiles escolares y quién sabe qué productos más cuentan con la figura del patético felino menemista como imagen.

Ya es sabida la tendencia de NIK a apropiarse ideas ajenas y disfrazarlas haciéndolas pasar por propias (si usted no lo sabía le recomiendo fervientemente éste post del blog de Seleccione). No obstante, y aunque el plagio es una acción reprobable, no es lo peor. Lo peor es la gaturrización de una infancia que necesita figuras que representen las realidades de chicos cuyos padres no lean La Nación, tengan diecisiete tarjetas de crédito, se vayan de vacaciones dos veces por año y escuchen ASPEN en sus Citroen C4. Los pibes no necesitan la eterna historia de un gato horrible cortejando a una gata más horrible aún, en las afueras de una casa ABC1, en un barrio burgués. Los pibes necesitan ver padres que se levanten a las seis de la mañana para subirse a un tren (sin saber si vuelven a casa), que vuelvan a las ocho de la noche agotados con ganas de tomarse una cerveza y mirar el fútbol, mientras que la madre tuvo que limpiar tres casas como empleada doméstica, llevarlos al colegio, ir a buscarlos, cocinarles, limpiar la casa propia, lavarles la ropa, bañarlos y como si fuera poco, bancarse al marido borracho mirando fútbol y queriendo darle murra para hacerle otro pibe.

"La única verdad es la realidad: Pochie es un vatolocochón, ráscale, ráscale!!

Los niños son los únicos privilegiados, por eso merecen otro héroe. Menos gorila, más nac & pop. Menos burgués, más peronista. Los pibes necesitan a POCHIE, el perro justicialista. Porque como dijo el General, queremos que las futuras generaciones argentinas aprendan a sonreír desde la más tierna infancia.

(gracias @mic_y_mouse por el dibujito)

martes, 28 de febrero de 2012

Desmanes en show de Tito Losavio

SARAIEVA (De nuestro corresponsal) Dramática situación vivió el afamado guitarrista argentino Tito Losavio al ser agredido por una horda de fans de Man Ray en medio de un recital donde presentaba su disco solista "y lo que quiero es que pises sin un huevo", desarrollado en las instalaciones del Deportivo Gavrilo de esta ciudad. Losavio, de 67 años, debió interrumpir su show en varias oportunidades tras la incesante lluvia de mondadientes arrojados por un grupo autodenominado "montaña serbia, otra vuelta". "Si siguen con esta felonía, hago mi cover de 'la muerte de un payaso' de los Kinks" amenazó el célebre guitarrero.


Tito, encerrado en el sótano, pálido de miedo.  
Minutos después sobrevino el inicio de la catástrofe; el cántico que arrancó tibiamente se convirtió en clamor de masas: "olé olé, olé olé olá, solo te pido que se vuelvan a juntar" bramaba el gentío. Y claro, no olvidemos que el grupo Man Ray fue declarado visita ilustre de la ciudad de Sarajevo en 1992, plena guerra balcánica, donde la suave voz de Hilda Lizarazu, el bongó de su medio hermano Bixente y el virtuosismo de el gran Losavio aplacaban la furia de los soldados y hasta hermanaba a los pelotones. En esa ocasión presentaron su multiplatino "perro de playa". Recordemos que el hit "olvidate de mi (llevate a tu mamá)" fue tomado como himno oficial del ejército Kosovar. Su show en la plaza de gobierno "Robert Prosinecki" de Sarajevo convocó la friolera de tres millones y medio de personas que, OK, no tenían donde ir, arrasadas sus casas por el fuego enemigo.

"Nunca olvidaré el sitio a Dranjka, donde tras arduo trajín y días de lucha en los que perdimos a nuestros mejores hombres, todos nos hermanamos al son de "Caribe sur" aquella célebre música de los sudacas." comenta entre sollozos y pedradas Rinat Dassaev, legionario búlgaro. "y ahora este tipo viene solo acá, sin Hilda no es lo mismo, no es lo mismo" grita Rinat, antes de perderse blandiendo una faca, en la turba iracunda que provoca destrozos en las instalaciones del humilde club.